Esta pregunta que podría parecer un poco absurda hace unos años es ahora una de las cuestiones que están en la mayoría de debates a nivel global. Nuestra sociedad ha avanzado en seguridad a medida que avanzaba en libertad, claro que a veces los que tenían que generar seguridad eran los que generaban inseguridad.
¿Pero dónde estamos ahora? Nos encontramos en una sociedad con miedo al otro en la cual los discursos de nosotros y los otros están son frecuentes en cualquier tertulia ciudadana, donde no nos importa ceder un poco de libertad a cambio de mayor seguridad. ¿Pero es necesario? Yo creo que no.
¿Pero dónde estamos ahora? Nos encontramos en una sociedad con miedo al otro en la cual los discursos de nosotros y los otros están son frecuentes en cualquier tertulia ciudadana, donde no nos importa ceder un poco de libertad a cambio de mayor seguridad. ¿Pero es necesario? Yo creo que no.
Podemos ver como proliferan los circuitos cerrados de televisión en el centro de las ciudades con el pretexto que son un elemento preventivo, ¿para quién?. No estamos en unos índices de inseguridad que requieran, de forma generalizada, esta iniciativa, aunque reconozco que puntualmente pueden ser útiles. No obstante, estamos dispuestos a estar controlados en plan gran hermano, o no lo estamos, esta debe ser la cuestión y yo tengo claro que mejor no.